CARTAS AL DIRECTOR - Abraham Méndez

A mí no me importa que se hagan ofertas electorales, porque alguna queda y nos beneficiamos de esas luchas políticas del “quién da más”. No es como cuando se suben los precios en temporada turística, luego se van los visitantes pero los precios quedan. Las ofertas han llegado a ser esperpénticas e irrealizables. La mayoría de propuestas son pre-electorales, pasajeras y mentirosas. Piensan que el pueblo, el votante no lo sabe, pero estamos curados de espanto y hartos de engaños. Está el que prometió una calle, plaza, carretera o centro social y al final de la legislatura comienza a inaugurar y cortar cintitas para que vean que algo se ha hecho. Luego el que se forró con tal o cual recalificación, autorización o soborno Da igual que sea de un partido o de otro, de todo hay en la viña del Señor.

Lo que más me gustan son los nuevos proyectos, las nuevas ideas, las que nadie pensaba que se harían y se ponen en funcionamiento rápidamente y se hacen efectivos. Yo jamás volveré a tener un hijo, ya tuve 3 y nunca recibí los 2.500 € de natalidad que hoy son una realidad, como lo será la elevación del salario mínimo a la dignidad o el aumento a los jubilados o el nuevo estatuto de los autónomos u otra serie de asuntos que este gobierno ha puesto en marcha. Esperemos tenga suerte la impetuosa y admirada Ministra Carmen Chacón, en el tema de los pisos, si no le caerá una buena. Porque no se debe caer en el paternalismo, en el proteccionismo, estatal, es malo esa sobreasistencia que compra voluntades a cambio de no pegar golpe como el famoso PER en Andalucía, ya que apoltrona y no se lucha por algo mejor para la familia y la sociedad y provoca la economía sumergida. Eso es lo que ocurrió con los países soviéticos y lo que sucede en Cuba. El Papá Estado lo hace todo, tú no pienses, no opines, no te quejes, mal vive y calla. Al ciudadano se le convence y se gana su confianza y su voto, dando lo que necesita ahora y no promesas a futuro. Esto ha sucedido por desgracia con Rigoberta Menchú la flamante premio Novel de la Paz, que su pueblo le ha dado la espalda por darla ella a sus indígenas, porque solo se preocupó de sus intereses y no de esas clases sociales olvidadas. Por ello Santa Rita, Rita, Rita lo que se da no se quita. ¿Recuerdan?


ABRAHAM MÉNDEZ RAMOS